Como operaciones de comercio exterior, las exportaciones tienen una serie de particularidades que hay que tener en cuenta cuando llega el momento de la facturación. Trabajar sobre la base de un modelo de factura de exportación de España puede agilizar mucho el trabajo y evitar errores.
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Factura de exportación: datos obligatorios
Por el momento, vamos a dejar a un lado las operaciones intracomunitarias y nos vamos a centrar en las exportaciones, que son aquellas transacciones que implican la entrega de bienes o prestación de servicios a un país que no forma parte de la Unión Europea.
Un ejemplo de factura de España con destino a una empresa, profesional o particular que esté en el extranjero, debe contener los datos mínimos que recoge el Real Decreto 1619/2012, que es el que regula las obligaciones de facturación. Es decir:
- Número y serie de la factura.
- Fecha en que se expide.
- Nombre y apellidos, razón social o denominación completa, NIF y domicilio fiscal del emisor y del receptor.
- Concepto. Es una descripción de la mercancía vendida o de los servicios prestados, así como el número de unidades y el precio unitario.
- Base imponible. Al tratarse de una operación de carácter internacional, es especialmente importante reseñar la divisa en la que se van a hacer las operaciones. Esto se decide por acuerdo entre comprador y vendedor.
Junto a estos requisitos exigibles en cualquier factura emitida en España, con independencia de dónde se encuentre el receptor, hay una serie de elementos que son propios de la factura exportación:
Tipo impositivo
El artículo 21 de la Ley del IVA señala que las exportaciones de bienes están exentas de IVA, sin importar si el destinatario es una empresa, un profesional, o se trata de un particular.
Por tanto, un modelo de factura de exportación de España no contiene IVA, pero debe contener una mención que haga referencia a que, en virtud del artículo 21.1 de la Ley del IVA, esa operación está exenta de pagar este impuesto. En caso de que el exportador sea un autónomo, la factura no debe contener en ningún caso retención de IRPF.
País de origen de la mercancía
El documento debe dejar bien claro que la mercancía se envía desde España con destino a otro país que no es miembro de la Unión Europea.
Condiciones de pago
Al tratarse de una operación internacional, estas condiciones deben estar debidamente especificadas en la factura. Incluyendo los medios de pago aceptados y la fecha tope para hacer el abono.
Medio de transporte utilizado y coste del mismo
Esta información se incluye porque puede ser importante de cara a la aplicación de los IncoTerms, que son unas normas internacionales que se aplican con respecto a las condiciones de entrega. Por ejemplo, quién se hace cargo de pagar el transporte, o quién es responsable de los daños que los bienes puedan sufrir durante su traslado hasta el lugar de destino.
Código HS
Si las partes han decidido aplicar IncoTerms en su relación comercial, deben incluirse los códigos HS de comercio internacional que sirven para identificarlos.
Obligaciones legales y requisitos para facturar una exportación
Para poder emitir una factura, primero es necesario haber obtenido la autorización de exportador autorizado. Esto permite agilizar los procedimientos aduaneros, porque los productos incluidos en la autorización aduanera tienen origen preferencial.
La solicitud se hace en la Sede Electrónica de la Agencia Estatal de la Administración Tributaria, indicando datos básicos como la identidad del solicitante, una breve descripción de su actividad exportadora, la descripción de su sistema contable e indicaciones sobre los sus proveedores.
También es posible contar con la ayuda de un tercero especializado en comercio internacional para acceder a esta autorización. En España, las Cámaras de Comercio suelen ofrecer este servicio, pero otra alternativa es contratar a especialistas en exportación que se encargan de toda la tramitación administrativa y legal relacionada con estas operaciones.
Por otro lado, para poder exportar de forma legal, es necesario conocer la política comercial y arancelaria del país al que se desean enviar los productos. Preparar la documentación necesaria para la aduana, cumplir con la normativa sanitaria y de seguridad y estar al tanto de las normas sobre etiquetado.
Además, es importante tener en cuenta que hay países en los que la entrada de determinados productos puede estar prohibida o limitada.
Los impuestos en las facturas de exportación
Aunque las exportaciones están exentas de IVA, los exportadores tienen que registrar estas operaciones en su contabilidad y luego informar de ellas a Hacienda a través de la presentación del modelo 303 de autoliquidación trimestral del IVA y del modelo 390, que tiene carácter anual.
Si no se presentan estos modelos ante la Agencia Tributaria, aunque todo el proceso de facturación se haya desarrollado y facturado correctamente, la Administración puede imponer una sanción.
A efectos contables, para cumplir con las obligaciones tributarias formales, es necesario que las facturas de exportación se anoten en el correspondiente libro de registro de facturas expedidas.
En la contabilidad, se inscriben como cargo a la cuenta del cliente con abono a la cuenta de ventas y se incorporan a las previsiones de cobro. Esto permite hacer un seguimiento de estas facturas, aunque no haya que realizar ninguna operación fiscal con estas partidas.
El modelo de factura de exportación en España no es complicado. Como ves, el documento es muy similar al que se elabora en las operaciones internas; solo debes tener presentes algunas pequeñas particularidades.